viernes, 2 de diciembre de 2011

SILVIO :-)




El siguiente de mis gatos al que voy a presentar es Silvio, por edad, el 4ºde mis gatitos, y aunque los quiera mucho a todos, él sabe perfectamente que es mi favorito.


Silvio llegó en julio de 2010, me lo trajo Rosario, una antigua colaboradora de Defensa Felina, para que ayudara adaptarse a Lolita, la callejera salvaje y extremadamente arisca que acababa de adoptar. Le había llegado una llamada de un chico en Pino Montano que había escuchado maullidos en la ventana y era porque le habían tirado un gato por la ventana y éste estaba en el toldo. (Increíble, le deseo la peor de las muertes a ese malnacido o malnacida). Éste chico lo cogió, pero tenía ya un perro grande en su casa y no sabía nada de gatos, así que llamó a DF para ver si le encontraban algo. Sabía tan poco de gatos que ni cayó en ponerle un arenero la primera noche que pasó en su casa, y el pobre lo pasó muy mal.


Yo no tenía ninguna preferencia por los siameses, pero ninguno de mi gatos (excepto Lolita) fueron realmente "elegidos", así que me dio igual. Rosario me trajo a una micurria de 2 meses que no paraba de maullar en el transportín y al llegar a casa nos quedamos embobados con esa pelusilla blanca de nariz sucia que correteaba por la casa.


Era suave como una bolita de algodón y olía tan bien, como un bebé. Además al abrazarlo te devolvía el gesto, si le besabas, lo hacía él también. Desde el primer momento, desde que abrimos el transportín en el suelo de la cocina, pareció sentirse como en casa. Y era TAN cariñoso que no nos lo podíamos creer. El perfecto compañero para ablandar a la arisca Lolita, que ya me había soltado unos buenos zarpazos de esos de atacarte en serio a lo bestia.

Y a mí se me caía la baba con Silvio, que me comía a besitos, me daba lametones, dormía conmigo, me seguía a todos lados y no paraba de querer jugar, acariciar y ser acariciado. Silvio es un ángel. Cuando entraba en el baño se ponía a maullar fuera dando con las patitas en la puerta y no paraba hasta q lo cogía en brazos al salir y le daba mimitos. Siempre me esperaba en la ventana al verme llegar y lo primero que hacía y sigue haciendo es ponerme los morritos para restregarme la cara.


Lolita dejó de maullar por las noches y de estar tan agresiva cuando llegó él. Desconfiaba, pero al menos estaba tan centrada en averiguar quién era el nuevo inquilino que pasaba de nosotros. Silvio le hacía carantoñas, ella le bufaba, Silvio le traía en la boca los juguetes para que jugasen juntos, y poquito a poco se fueron llevando bien, y Lolita empezó a
pasearse por la casa delante nuestra, a dormir en el sofá y lavar a Silvio todo el tiempo (él encantado obviamente). Lolita no era una gata cariñosa, ni siquiera mínimamente sociable, pero gracias a mucha comprensión, muuucha paciencia, cuidado y al cariño de Silvio, ahora Lolita es una gata completamente diferente, que me espera en la puerta cuando entro en casa y me pide caricias, aunque no me deje nunca cogerla en brazos.

Y Silvio sigue siendo un encanto. Tuvimos en acogida a una gatita procedente de un desahucio, que Lolita no quería ni ver y a la que bufaba muchísimo, pero Silvio se encargaba de cuidarla. Era muy gracioso porque si Lolita entraba en la habitación con ella delante bufaba a la pequeña, y se alejaba de ella, pero cuando Lolita no estaba a la vista jugaban juntos, la lavaba, la abrazaba mientras dormía, aún hoy entra en el arenero después que ella para cubrirlo todo, cuando les ponemos la comida procura que la peque coma la primera...Silvio es un madrazo, rebosa cariño.Hasta en el veterinario se porta bien. Le encanta su vete Virginia, de la clínica Santa Justa, y su ayudante Carolina; una vez por
una urgencia tuvimos que llevarlo a otro vete le bufó, fue la primera vez que le vimos bufar a alguien, se portó fatal, sin embargo con Virginia y Carolina es un buenazo. (Al contrario que Lolita, que cuando la llevamos es como vivir Jurassic Park, ni los sedantes y la jaula pueden con ella)

Le echo muchísimo de menos. Mucha gente me llamaría loca por esto pero yo lo echo más de menos ahora que estoy en Francia que a cualquier otra persona. Con mis padres y mi novio, amigops hablo por teléfono o por internet, pero con Silvio no puedo, claro. Según Christian desde que me fui está súper cariñoso, que debe echar en falta mis mimos porque está de un pegajoso increíble, y que maulla mucho cad vez que Christian se va a clase o a trabajar o q simplemente esté en la cocina con la puerta cerrada, porque según él debe tener miedo a que él se vaya también y me echa de menos. No sé si será verdad, a saber qué pasa por su cabecita, pero yo prefiero pensar que me echa de menos. No es lo mismo irme a dormir sin acariciar su pelo súper suave, ni despertarme sin sus mimos. Espero que no me haya olvidado. Estoy deseando volver en navidades para jugar con él, le encanta traerme su serpiente de peluche en la boca para que yo se la lance y él la vuelva a traer mil veces, mientras que la pequeña Luna simplemente corre detrás de él. También le encanta que le ponga un poco de spray de catnip en el rascador para volverse loco haciendo piruetas.

Con ninguna de mis gatas, a las que quiero mucho, he tenido una conexión tan bonita como tengo con Silvio. Y eso que Phoebe también es muy mimosa, y Lunita igual. Con Phoebe puedes hablar, maulla muchísimo y te contesta, con Silvio pasa igual, es muy hablador, pero es diferente. Es un gato muy muy especial que encanta a todo el mundo que lo conoce.

Y nada, ése es mi niño, al que quiero con locura y pienso cuidar el resto de su vida, como deberían hacer todas las personas con sus compañeros animales. Si los tratas bien ellos son muy agradecidos, y Lolita es la prueba viviente de ello.

martes, 29 de noviembre de 2011

MUY IMPORTANTE!

http://www.nuez.es/proyecto-social/pienso-luego-existe.html

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Aunque os pidan datos, NO MANDAN SPAM, el email, nombre y móvil es para autentificar que los votos equivalen a diferentes personas y asegurarse de que no somos nosotros mismos votándonos todo el tiempo.

Sólo será 1 minuto, no os cuesta nada, y vais a ayudar MUCHO.

Besitos

Fuente Cat Mate

A mis peluches les ha gustado la fuente!

Llegò a casa y Christian me puso la webcam mientras desempaquetaba para que viese a mis peques volverse locos con las cajas y las bolsas. Les encanta que haya pedido de zooplus, aunque sòlo venga pienso, para ellos siempre es un jugo, porque se lo pasan pipa con las cajas. Aunque hay que tener cuidado porque Luna se mete de una forma muy rara y se encierra a sì misma dentro, y si no me doy cuenta se echa a llorar, Silvio acude raudo a salvarla y me los encuentro a los 2 muy apurados.

Pero esta vez sì que habìa juguetitos para todos:

La fuente famosa CatMate, que me decidì a comprar después de leer sobre ella en el blog de la gata Lupe y de Michis por el mundo. Al principio desconfiaban, y Lolita que es la matriarca, no les dejaba acercarse mientras olisqueaba y tanteaba con la patita. Luego decidiò que era mejor no arriesgarse y se fue. A Silvio y a Luna les ha gustado mucho en cuanto la han probado, se ponen a beber cada uno de un chorrito. Segùn Christian estàn bebiendo màs ahora que tienen la fuente, asì que està cumpliendo su funciòn. Lo ùnico es que dice que si baja el agua de un mìnimo se recalienta el motor. Eso es malo porque la idea era que se quedase funcionando cuando no estamos si salimos unos dìas y tengan agua fresca, como esta semana por ejemplo, en que ha venido a visitarme a Parìs. Pero bueno, no sé hasta qué punto, yo es que aùn no la he visto en persona, sòlo por webcam, dejò el portàtil en el suelo y yo los observaba sintièndome documentalista de la 2 de fieras de salòn.

El tùnel de juego de Cat Senses de Royal Canin. Esto ha tenido muchìsimo èxito con Luna, pero los demàs ni cuenta. Luna se vuelve loca con la pelotita y al parecer se tira horas jugando; pero los otros 2 nada. Pedimos snacks Smilla toothies para los dientes y se los puso dentro del jueguete. Esto la estimulò mucho màs y en seguida los otros 2 querìan comérselos. Silvio intentaba sacarlos; Luna muy emocionada también, pero la espabilada de Lolita se esperaba a que los sacasen los demàs para quitàrselos...sobre todo a mi Silvio, como es el màs inocentòn...En balance...para Luna muy buena compra y para los demàs 0.

Lo que sì que les ha encantado a todos es un quesito blandito con juguetes dentro que venìa de regalo con el pienso de Royal Canin de 10kgs, se vio volar a los ratones. Para después de navidades empezaràn a tomar Royal Canin sterilised mezclado con Orijen, a ver qué les parece.

Paul McCartney en Parìs!

El domingo soñé con algo de un concierto, nada premonitorio, pero al caso es que cuando me desperté me dije: Oye, hace mucho tiempo que no me paso por la web de Paul, mira que si hace gira otra vez y da la casualidad...Y toma! Concierto el miércoles, o sea, mañana jeje.

Lo gracioso es que en mi primera erasmus hace 2
años ya coincidì con un concierto de Paul, parece que me persigue :-) Entonces le seguìa la pista, y aunque sabìa cuàndo saldrìan en venta las entradas no pillé màs que de reventa, se agotaron en segundos. Esta vez he tenido suerte de pillar de reventa 3 dìas antes del concierto y a un precio no demasiado desorbitado, casi el doble.

Lo malo es que cae en miércoles y los miércoles trabajo de 1 a 4 de la tarde, pero por suerte mi amigo Dani (al que le estoy muuuuy agradecida) se ha ofrecido a guardarme la cola durante esas horas. Es un auténtico detallazo.

Ay, estoy muy emocionada, aunque vaya a ir sola, un concierto de Paul es algo muy especial para mì. Ademàs desde el 2004 no ha vuelto a Espa
ña, y quién sabe si volverà a dar conciertos allì, asì que tengo suerte de pillarle cuando estoy en el extranjero. Soy una beatlemaniaca, por eso mi primera gata se llama Lucy (Lucy in the Sky with Diamonds), y aunque incondicionalmente prefiera a John Lennon, ver a Paul no està nada mal.

martes, 22 de noviembre de 2011

Phoebe, mi niña





Phoebe llegó a casa el día de reyes de 2007.
La adoptamos para hacerle compañía a Lucy, después de habernos mudado a un piso más grande, pensamos que le vendría bien tener una hermanita con quien jugar, así que nos pusimos en contacto con Arca de Noé Sevilla y nos traimos a Phoebe.

Cuando Phoebe llegó era una micurria que no sabía maullar, hacía un ruido raro, como a pájaro ronco, que me hacía mucha gracia. A quién no le hizo ninguna gracia es a Lucy, que nos dejó bien claro que ella ni necesitaba hermana, ni amiga, ni nada. Creo que Lucy se considera humana, y no le gusta que le acosen los gatos.



Phoebe era muy muy buena, es muy tímida y asustona, pero también cariñosa. Tiene un carácter especial que hay que comprender. No es una cascarrabias como Lucy, ni una pastelosa como Silvio, pero es una gata muy dulce. Se pasó el primer mes casi encerrada en mi cuarto, porque Lucy se la quería comer viva, ahora se soportan, pero no se quieren. Bueno Phoebe quiere a Lucy, pero Lucy a ella no.
A Phoebe le encanta jugar con las cañas, perseguir caramelos, lamerte las manos y sobre todo que la cepillen durante horas. Y, por supuesto, las gambas.

Es una gata muy casera. La terraza le da mucho respeto, y jamás sube a la azotea como su hermana Lucy a tender, en cuanto alguien abre la puerta de casa ella se esconde a la velocidad del rayo.


Se porta muy bien en el veterinario, es una gata buenísima y muy maulladora, se pueden tener auténticas conversaciones con ella. Y en cuanto la tocas, empieza a ronronear y entrecerrar los ojos.

Solía ser mi nena, me seguía a todas partes y dormíamos juntas, pero cuando me inidependicé mi madre no me dejó traérmela conmigo, así que ahora vive con mis padres, mi hermano y Lucy. Estoy segura de que haría muy buenas migas con Silvio, que es juguetón y cariñoso, pero qué se le va a hacer, tendrá que seguir aguantando a su gordita y refunfuñona Lucy a la que ella tanto quiere.
Quiero muchísimo a Phoebe

jueves, 17 de noviembre de 2011

Lucy: así empezó todo...


Lucy.
Lucy es esta preciosidad negra y blanca que parece que lleva los labios pintados de negro. Es la gata más bonita del mundo. Su fecha oficial de cumpleaños es el 1 de mayo, el día del trabajador, como burla por lo floja que es. Tiene ya 7 añitos y medio, que se dice pronto, y es la reina de mi casa. Aunque mis padres la quieran más que a mí yo no me pongo celosa, porque Lucy lo vale jeje

A mí, (aunque esto la gente que me conoce desde hace menos de 7 años no se lo cree), no me gustaban los gatos. No me llamaban la atención lo más mínimo. Eran bonitos sí, y yo amaba a todos los animales como buena vegetariana que soy, pero los gatos como mascota...psss Yo era más de perros, aunque nunca hubiese tenido uno porque mis padres no querían.
Pero entonces llegó Lucy. En la calle Feria de Sevilla había una caja con un cartel que decía "necesitamos cariño" (lo de las gambas los domingos, el pienso royal canin y las mil cepilladas diarias se lo callaban de momento). Había unos niños jodiendo con la caja, zarandeándola y tal, y se escuchaba un maullidito...y ahí estaba Lucy, la única que quedaba de una cámada de no sé cuántos, cabezona, canija, feucha y llena de pulgas.

Me la llevé, e hice un largo camino hasta la casa de un amigo con ella entre el bolso y las manos, que me dejó destrozadas de arañazos. La metimos en una caja de cartón y allá que me presenté con ella en casa. Mis padres me iban a matar, sobre todo mi madre. Que también era de perros y tenía la idea de los gatos como ariscos y territoriales (que Lucy concretamente sí es pero bueno...se lo consentimos). Pero no la iba a abandonar. No teníamos NI IDEA de gatos, yo me vi con ese bicho que cabía en la palma de mi mano, tan flacucho, que no hacía más que rascarse pulgas y no sabía qué hacer con él. Mi padre había tenido una gata de niño, así que me dijo lo de la arena y bajé al jardín del bloque a por un poco de tierra. Tan micurria como era, y ya sabía hacer sus cositas en la arena. No más verla se fue corriendo al cuadradito de cartón de leche que llené de arena e hizo su pipí.
La idea era, en teoría, buscarle una familia, pero al final nos enamoramos de ella y ahora no sé qué habríamos hecho sin ella. Yo desde luego sería una persona diferente si ese día no la hubiese cogido de esa caja de cartón, porque a raiz de tenerla me he involucrado en el mundo del animalismo. Ella a la que más quiere es a mi madre, sin duda, y además es muy celosa con ella. Al resto nos soporta y de vez en cuando juega pero está claro que sabe quién es su mami. Yo la quiero muchísimo, aunque sea un bicho mordedor con muy malas pulgas.

Mis gatitos: Lolita

Bueno, soy una amante de los animales en general y de los gatos en particular, eso lo sabe cualquiera que me conozca. Y claro, desde que estoy en Francia (ya va mes y medio) los echo muchísimo de menos. Más que a cualquier persona, porque con la gente hablo por internet, por teléfono, por carta...pero con mis michis no puedo!

Tengo 3 propios viviendo conmigo, y 2 hermanas felinas que tiene en casa mi madre, así que en total tengo 5 gatos, 4 hembras y 1 macho que es el mayor de mis amores.
Presento a la mayor: Lolita

Es una gatita blanca con manchas atigradas. Lolita era hija de Triana, una gata atigrada que vivía en la calle Betis abandonada y a la que yo me llevé alimentando y dándole las pastillas para el celo durante años. Las pastillas no son buenas, y a la larga más caras que una castración pero no encontraba nadie que la pudiese cuidar en el postoperatorio así que nada. No eran muy efectivas porque tuvo varias camadas, la última fue la de Lolita.
Cuando Lolita tenía unos 3-4 meses pude castrar a la madre, que creía embarazada, pero lo que tenía era una infección enorme en el útero que se la habría cargado de haber esperado una semana más a operarla. Parecía preñada y todo era pus, imagínate. Resulta que tenia una ligadura de trompas mal hecha, o sea que era una gata casera a la que echaron de casa por el celo. En la foto se ve a Triana con 2 hermanitos de Lolita. Una desapareció, al macho blanco y negro lo sigo alimentando.
En el verano de 2010, cuando volví de mi primera Erasmus y me independicé decidí adoptar a Lolita, que ya tenía 2 años. La castré y me la llevé a casa. En la calle era mimosa, siempre pedía caricias y al oír mi voz salía corriendo en mi búsqueda...pero no le gustó nada verse de pronto operada y encerrada, además con otro extraño en casa. Nos bufaba, lloraba por las noches, se pasaba escondida todo el día, sólo pegaba grandes carreras para usar el arenero y volver al escondite. Si intentabas acariciarla te echaba la zarpa encima. Era súper agresiva, realmente pensé que no se adaptaría a vivir en un hogar. Llevaba ya mes y medio con ella cuando empecé a buscar algún campo controlado donde pudiese estar segura y salvaje. Pero no quería, no podía abandonar a mi Lolita, por muy callejera que fuese desde un principio. No tengo fotos de esta época porque es que yo misma no la veía. Sólo limpiaba el arenero y reponía comida y agua.

Bueno, me aconsejron traerle a un hermanito, un cachorro macho, ya que ella estaba acostumbrada a estar con gatos y con nosotros siempre se sentiría extraña. Fue la mejor decisión que pudimos tomar.
Dejó de llorar por las noches, juagaba mucho con él, se la veía mucho mejor. Seguía sin querer nada conmigo, pero al poco tiempo se convirtió en una gata distante pero sociable...y hoy en día hasta puedo acariciarla! Me ha costado 1 año poder acariciarla con normalidad, 1 año. Pero con los animales hay que tener paciencia. Mi mayor logro lo hice antes de venirme aquí, cuestión de 1 mes antes o así, y es que se dejase dar besos :-)
Con los gatos sí es muy cariñosa, y con los humanos, poco a poco, cada vez más. Vuelve a ser mi mimosona callejera. Nadie lo habría dicho al principio, nadie. Era tan agresiva, una furia, no parece la misma gata.

Fabrication française


Hace unos días empecé a pensar en los regalos de navidad, y decidí regalarle a mis padres merchandising de mi universidad, estilo pija usamericana súper orgullosa de su campus (no soy así) pero sé que a mis padres les hará ilusión, y que mi padre fardará de que su hija estuvo trabajando en la Sorbona. ¬¬

Me fui a la tiendecita oficial que tienen en la portería de la Universidad a echar un vistazo. Pedí una XL para mi padre, un polo con el emblema de la universidad, y para mi madre una sudadera, talla M. Le pregunté al chico si el material encogía al lavarse para así prevenir y comprar una talla más (veía la sudadera bien, pero justa, y es algo que debe quedar holgado). ¡Cómo pudo ocurrírseme! El digno francés (y de la Sorbona además, que son los peores en cuanto a orgullo se refiere...) me clavó la mirada y me espetó

"Jamais! C'est fabrication française!"

Uy! uy! escuse muá! No es que se les viese mala calidad, y no dudo de que las prendas sean buenas, pero la respuesta me pareció desmedida, es cuestión de estado, vamos!

Con los franceses ya se sabe, como con los usamericanos, la patrie ni tocarla.

domingo, 23 de octubre de 2011

El año de Saeko. Kyoichi Katayama

" ...
-Qué raro, ¿verdad?Un virus, como el del sida, por ejemplo, puede coexistir con el organismo humano, pero el cáncer no. Y eso que el cáncer no es un invasor que venga de fuera, sino una parte del propio cuerpo. Las células enloquecen y empiezan a dividirse. Parece que el hombre actual ha dejado de llevarse bien consigo mismo, ¿verdad?
..."

El año de Saeko, Kyoichi Katayama, Alfaguara 2006, pàg 101

domingo, 9 de octubre de 2011





Aquí es donde vivo. (Por dentro no es tan elegante, os lo aseguro...). Está lleno de Sheldons y Leonards, intelectuales de familias ricas de todas partes del mundo, aunque son sobre todo franceses y británicos. ¿Qué pinto yo aquí?


domingo, 2 de octubre de 2011

Haruki Murakami. 1Q84


Ya han publicado la 3ª (aquí en España 2ª) parte de la última novela de Haruki Murakami, 1Q84.

Estoy emocionada, porque el libro me está encantando y me tiene totalmente encandilada, tan enganchada como no estaba desde Kafka en la orilla. Pero al mismo tiempo tengo miedo de continuar, temo que las expectativas no se cumplan, y que como es normal en Murakami, muchas preguntas queden abiertas. Tan sólo espero que no las fundamentales. Eso fue lo que pasó con Kafka en la orilla.

Las tramas paralelas de la asesina Aomame y Tengo, matemático y escritor, están cada vez más cerca de unirse, y personajes como Ushikawa y Eri, Vanguardia...prometen nuevas líneas en el desarrollo de la historia. He de decir que después de leer la fallida After dark, esperaba poco de esta novela, pero las 2 primeras partes me sorprendieron gratamente y espero que la 3ª no me decepcione.

Con Murakami tengo un cariño especial, tal vez porque nos unen varias cosas en común: el amor por los gatos, por los Beatles y la cultura de los 60 en general, y por escritores como Scott Fitzgerald o George Orwell. Muchos de sus guiños literarios me llegan de manera especial, y sus historias me sitúan muy pronto entre los personajes, viviendo intensamente sus pasos. Con Murakami conectas hasta la médula o no conectas.

Aún recuerdo cómo me acerqué por primera vez a este escritor. Tendría unos 15 años y en mi instituto habían organizado una mini feria del libro en la biblioteca. Había varios tenderetes con libros de segunda mano provenientes de donaciones y otros nuevos de editoriales, todos muy baratos. Echaba un vistazo, la mayoría de los clásicos ya los había leído o los tenía en proyecto por casa, y era muy reticente a probar escritores "modernos", o "nuevos". La biblioteca que tenía en casa era mayormente de clásicos, grandes escritores cuyos libros no tenían menos de 50 años de antigüedad (mis escritores favoritos eran y siguen siendo Víctor Hugo, Balzac, Conan Doyle, Poe, etc.) Así que desconfiaba de todo lo nuevo. Los contactos que había tenido hasta entonces con una literatura más moderna habían sido de literatura juvenil... Y la literatura juvenil se me había descubierto varias veces como una suerte de literatura para adultos gilipollas.

Pese a todo, vi Norweggian Wood (Tokio Blues) y en seguida quise comprarlo. No conocía al escritor, y su nombre japonés me sonaba a chino. Pero me gustó la apariencia del libro. El elegante diseño en negro que caracteriza a Tusquets, y la portada con esa foto de una chica de espaldas, con las manos escondidas como guardando un secreto. ...Y sobre todo, claro, el título: Tokio Blues, Norwegian Wood. ¡Era una canción de los Beatles, y una de mis favoritas además! Así que lo compré y leí mi primer Murakami, al que seguirían muchos.

Por ese tiempo descubrí que era un autor de culto, ahora se ha puesto de moda entre las esferas gafapastistas pseudo intelectualoides el renegar de él. Este tipo de élites actúan como la "masa" que desprecian. Si a uno les gusta seguir la corriente, el otro rechaza todo lo que salga de un estricto círculo de "incomprendidos". Me recuerdan al personaje de Pallarés del jueves, Baldomero (por lo demás despreciable...). A raíz de Tokio Blues Murakami se convirtió en un best seller, se puso de moda y por lo tanto dejó de gozar de prestigio en el ámbito intelectualoide. El libro es de 1990, aunque no sé cuándo llegó a España, yo lo conocí en 2003.

Independientemente de la fluctuación de las modas, de que venda millones de copias o ninguna, Murakami es un escritor especial, irregular y adictivo. Dio la razón a sus malos críticos con After Dark, libro para jóvenes con más forma que contenido, tedioso y repetitivo. Soy fan suya, pero debo admitirlo, After Dark se me hizo largo siendo corto. Pero no creo que nadie que haya leído Norweggian Wood, El pájaro que da cuerda al mundo o Kafka en la orilla pueda decir que es un mal escritor. Te gusta o no te gusta, vale. El realismo mágico a veces es difícil de digerir. Pero Sputnik, mi amor es una de las historias de amor más hermosas jamás escritas.

Veremos si 1Q84 no me decepciona.
Cruzo los dedos (a la espalda, como la portada de Norweggian Wood)

sábado, 1 de octubre de 2011


Me voy 6 meses a París con una beca Erasmus prácticas, ya ésta va a ser la 2ª vez que sea Erasmus, y es que no me canso de esta ciudad. Desde que leí Los Miserables con unos 11 años, Víctor Hugo ha sido el culpable de hacerme soñar con París, y cualquier excusa ha sido buena para volver.

Así que el viernes me marcho a la ciudad de la luz, a trabajar en la Sorbona, a husmear en archivos y a vivir la historia y la belleza de los rincones de París.

...y a echar de menos, entre otras cosas y personas, a mi gatito Silvio, que le da nombre-dirección al blog y que va a dejar de despertarme cada mañana a lametazos :-(

Tu vas me manquer le plus, mon Silvio!